martes, 16 de noviembre de 2010

Ideas para regalar



Queridos todos;

Ante la inminencia de las fiestas navideñas y como luego os pilla el toro a última hora haciendo compras como locos en cualquier gran cutre-superficie, os voy a dar unas ideas que os van a solucionar unos cuantos compromisos de la mejor de las maneras.

A la tía Enriqueta, la solterona, esa que se tiñe el pelo de lila o rosa (la tercera edad es muy punk y no se lo tenemos lo suficientemente reconocido), que hace pañitos de ganchillo hasta para poner el papel higiénico y siempre te agarra del brazo haciendo cepo, mientras te susurra al oído:

- A tí, que eres mi favorita, te voy a legar mi colección completa de Lladró, la buena... (y tú sientes escalofríos de pensarlo)

A esa buena mujer, podeis hacerla muy feliz si la obsequiais con alguna figurita de Jessica Harrison que es una artista super maja con una infancia super feliz, tal y como se refleja en su obra.

Al bebé de la casa (esto no es válido para los hijos propios) pongamos al sobrinito ceporro y llorón que pone la banda sonora de cada celebración con sus llamadas de atención, sus gritos y pataletas ante el estoicismo de sus padres que han perdido todo sentido del respeto por el oído ajeno, nada mejor que algún complemento de Shi Jinsong, artista chino, experto en educación infantil.

Ya vereis como no se vuelve a oir ni una mosca, oye.

A mamá, obsesa de la limpieza, capaz de sostener y manejar a la vez, cual diosa Kali, el matamoscas, el cucal, trapos varios, la escoba, el recogedor y la aspiradora a la búsqueda del bicho infecto que no la dejará dormir hasta que sea ejecutado públicamente (y con escarnio previo), ¿qué mejor regalo que un fabricador de bichos, para que siempre esté ocupada?

Se pueden realizar en varios sabores, para que no digan.

Desde Chez Tribeca seguiremos investigando el mercado para ofrecerles muy pronto nuevos gadgets para solazarles.

Aprovechen, pececillos, estos consejos que les damos y verán como alguien les estará muy agradecido. Puede que no exactamente el destinatario del regalo, pero alguien se parte, seguro.

De nada.