Le grité al espejo 48 veces la misma canción. Recordé que hacía muchos años lloré escuchándola. Alguien me había roto el corazón y por algún motivo, aquella canción me vinculaba a él, o me hablaba de él, o yo me lo inventé todo. No puedo recordarlo. Tampoco puedo recordar quién era él. Demasiadas cuentas que hacer. Sólo que me hacía llorar.
Ayer le grité al espejo 48 veces la misma canción. Y lloré, para hacer juego. Pero ayer sí sabía quién me hacía llorar.
Desperté en Buenos Aires.
Hola, maja, ¿cómo estás?
-
* Diciembre de 2023*
-Cieliamor...
Tenía que haber sospechado. Siempre que ZaraJota me llama así es porque
quiere algo.
-Qué.
-¿Tenemos algo programado pa...
Hace 1 semana